"Cath y Wren son gemelas idénticas, y hasta hace poco lo hacían absolutamente todo juntas. Ahora están a la universidad. Wren le ha dejado claro que no piensa compartir habitación con ella. Para Wren es una oportunidad única de empezar de cero y conocer gente. Para Cath no es tan fácil. Es terriblemente tímida. Su único mundo es ser fan de Simon Snow, donde ella se siente a gusto, donde siempre sabe exactamente qué decir y donde puede escribir un romance mucho más intenso que cualquier cosa que haya experimentado en la vida real. Sin Wren, Cath se siente completamente sola, fuera de su zona de confort. Tiene una compañera de cuarto antipática, siempre acompañada de su atractivo novio, un profesor de escritura que piensa que el fan fiction es el fin del mundo civilizado, un guapo compañero de clase, que sólo quiere hablar de palabras# Y además no puede dejar de preocuparse por su padre, que es amoroso y frágil y nunca ha estado realmente solo. Ahora Cath tiene que decidir si está dispuesta a abrir su corazón a los nuevos amigos y a las nuevas experiencias, y se está dando cuenta de que hay mucho más que aprender sobre el amor de lo que nunca creyó posible"
Rainbow Rowell sigue sin defraudarme.
De entrada la portada y el argumento de este libro me hacía pensar que iba a sentirme muy identificada, puesto que comparto la misma afición/pasión/vida que Cath.
No solo en relación al mundo de la escritura, de las aspiraciones académicas y laborales, sino también en su forma de ser. He empatizado con ella mucho más de lo que esperaba en un principio, y eso es algo que me ha sorprendido bastante.
Por primera vez creo que he estado de acuerdo en casi toda las decisiones, racionales y no que ha tomado el personaje con respecto a lo que le acontece en el libro. La verdad es que, salvo lo mal que se sentía por la no-relación con su gemela al principio del libro, Cath no me ha inspirado pena en ningún momento. Al contrario que muchos otros lectores que ya habían leído antes el libro. Aunque sí compartía su agobio y su desesperación en otros tantos... aunque todos tienen que ver con su hermana, de modo que casi que no cuenta.
Reagan es sin duda el mejor personaje secundario del libro. Esa chispa de "te odio pero me das pena y quiero que seas mi mascota-amiga" es muy buena. Es un personaje con carácter y lo demuestra cada vez que sale a escena, y maneja las situaciones a su antojo pero sin perder la cordura ni el humor.
En cuando a Levi... ¿qué podría decir a parte de que es mono hasta morir? Es todo un encanto. Ese tipo de personas que siempre tienen una sonrisa para todos, incluso para aquellos que no encuentran motivos para hacerlo. Es campechano, y muy, muy rural. ¡Eso me ha encantado! ¿Por qué los chicos de campo no pueden tener su encanto? Aquí queda perfectamente claro que pueden serlo.
Pero lo que más me gusta con respecto a su incipiente relación con Cath es que señalan que aunque parezcan diferentes a priori (sin tener los mismos gustos, pasiones o simplemente aspiraciones en la vida), eso no significa que dos personas no puedan estar hechas la una para la otra.
¡No todo se basa en equivalencias!
Y ese es el valor con el que me quedo principalmente de esta historia.
Los detalles de los fan fic escritos por Cath me han encantado, ¡incluso me he quedado con ganas de saber más con respecto a Simon Snow y Baz! Dios, he llegado a entender perfectamente porqué Cath los amaba tanto y me da pena que no vaya a saber más de ellos.
Lo único que no me ha gustado es lo que se refiere a Laura, la "madre" de las gemelas. De verdad, me parece que meter a ese personaje por medio era innecesario. Cath podía haber expresado sus sentimientos hacia ella igualmente sin que apareciera, y du disputa con Wren podría haberse dado igualmente si hubiera sido ella quien buscara ponerse en contacto con su madre. Porque a fin de cuentas... el hecho de que aparezca no solventa nada. No tiene un principio ni un fin distinto. De modo que... ¿para qué salir a escena? No sé, creo que ese tema podría haberse solventado de otra forma.
Y como puntilla final, me gustaría expresar mi deseo de que algún día en las universidades españolas se imparta alguna asignatura de LITERATURA CREATIVA.
Eso ayudaría a muchos jóvenes con aspiraciones literarias a ver un poco más cerca cumplido su sueño.
¡Que aprendan de algo bueno que tienen los americanos!
En definitiva, me ha ENCANTADO este libro.
Lo recomiendo a todo el mundo, sobre todo a los que les gusta el mundillo de la escritura y los fan fiction.
Se van a sentir totalmente identificados.
Mi valoración es de un 9'5 -por el detalle de Laura-. Pero es un libro de 10, sin duda alguna.